La industria alimentaria reclama oxígeno financiero

La Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (COPAL) encendió las alarmas: más de 14.000 empresas del sector enfrentan falta de capital de trabajo, altos costos energéticos y una presión fiscal que limita la competitividad. Su presidenta, Carla Martín Bonito, pidió medidas urgentes al Gobierno para “recomponer capital y recuperar previsibilidad”.

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En reuniones con ARCA y la Secretaría de Agricultura, COPAL planteó propuestas concretas: acelerar la devolución de IVA, agilizar los reintegros a la exportación y actualizar los incentivos fiscales al empleo formal. Según la entidad, estas medidas permitirían sostener el empleo y planificar las próximas campañas productivas.

El “monitor productivo” del sector muestra señales mixtas: aunque la producción creció un 3,9 % respecto de 2024, aún se ubica por debajo de los niveles de 2022 y 2023. En agosto, la industria de alimentos y bebidas registró una baja interanual del 2,3 %, reflejando la fragilidad del repunte.

“La industria alimentaria es un pilar de la economía argentina; necesita reglas estables y crédito para seguir invirtiendo”, insistió Bonito. COPAL remarcó que sin alivio fiscal y financiero, la reactivación será solo un espejismo.